A
la hora de la verdad todos salimos a la calle con un propósito y volvemos a
casa con los mismos, los consigamos o no. Pero cuando cae el cielo, cuando todo
oscurece comprendemos el valor de nuestra valentía y nuestra fuerza dejándolas
a los pies de nuestra cama. Nuestro colchón es ahora mismo nuestro fuerte. Esa
trinchera en la que permanecemos horas y en el que vivimos todos nuestros
sueños y pesadillas. Esos deseos que pueden o no cumplirse. Esas lágrimas
derramadas por personas que no las merecen y esas inevitables sonrisas que dejan
un "te quiero" a media luz susurrado al oído.
Recuperada de Flickr |
Esas noches agitadas en las que nuestro pulso se acelera.
Nuestro corazón, en un intento por huir entre la noche estrellada y el suelo de
asfalto, corriendo. Huyendo de nuestros miedos. Ese sobresalto de medianoche
que te alerta de que sigues con vida. Ese último suspiro nocturno por no caer
en esas terribles pesadillas que parecen realidad en nuestra mente. Esa maldita que nos juega malas pasadas. Te están acechando. No quieres que te
consigan alcanzar pero parece como si subida en tus
propios tacones y con un vestido de seda te fueran despojando de tu propio
cuerpo al tenerte a centímetros de esos malignos dedos que intentan rasgar esas
faldas que tanto te ha costado coser e hilar.
Hablamos de orgullo o bien podríamos
hablar de envidia. No lo sé; pero escapa de esos sentimientos. Corre lo más
rápido que puedas. Haz el mayor maratón de tu vida por alejarte de aquellos
pensamientos opacos que no te dejan ver más allá de tus ojos. No consientas que te atrapen, deja tu aliento en ese último sprint que te concederá la libertad pasando por la puerta grande con la cabeza bien alta.
Recuerda:
No
permitas que nada ni nadie
rompa
esos sueños que tanto
te
han costado conseguir
y,
a la vez, construir.
Muy bonita la entrada, sobre todo la conclusión. Voy a darme una vuelta por tu blog y a megustear tu página, así no me pierdo tus entradas! Un besito.
ResponderEliminaremediterraneo, de accesoriosymoda
Encantada con tu entrada, expresaste algunas cosas de las cuales estoy tan de acuerdo!!!
ResponderEliminarBesos!
La parte de la cama, me has descrito eso me pasa. Sonrio con un mensaje de un te quiero, he llorado en mi cama es como mi fuerte. Desdé ahí salgo a la guerra día con día y aveces aun que no encuentro la solución no me resigno.
ResponderEliminarMil gracias por pasarte por mi blog yake-kinky-kidboy.blogspot.com Soy YoMaqq Mucho gusto :3
y desde ahora te sigo, tienes un blog alucinante.
Espero nos leeamos mutuamente. Pasate cuando gustes seras bien recibida siempre.
Un abrazo del oso para tí.
Me ha encantado tu entrada, creo que lo del sobresalto de la cama es competamente cierto y lo hago mil veces. La verdad es que es un mensaje muy bonito el que nos dejas al final "No dejes que nadie rompa tus sueños". Tal vez habría que añadir "ni tu mismo"
ResponderEliminar¡Un besín!
Hola Caro!
ResponderEliminarPrimero que nada, perdón por no haber pasado antes, estuve corta de tiempo. Segundo, por tarerte el banner del sorteo ♥ y tercero, por esta increible entrada.
Es cierto, alas noches tiene algo especial en todo ser humano, es el momento de mayor reflexión que tenemos. Las veces que he llorado, lo he hecho en mi propia cama, bajo los sábanas, lamentandome y suplicando porque la vida se hace tan dificil a veces, poruq ela spersonas son tan hijas d eputas.... Pero como decis en tu reflexión final, lo importante es impedir que nada ni nadie destruya lo que tanto trabajo nos cuesta construir día a día.
Un beso Linda!
que bonita entrada!!! me ha encantado!! sobretodo eso de que "no permitas que nadie ni nada rompa esos sueños"...a veces nos olvidamos por completo...
ResponderEliminargracias por visitar mi blog :) me quedo como seguidora por aqui!!!
un besito tesoro!!
Me ha encantado tu entrada! Y tienes demasiado razón, más que un santo. La conclusión no podría ser otra. A luchar por tus sueños, que están para hacerse realidad! Buena entrada, y espero que me avises para la siguiente. Muak guapi! Te quiero ;)
ResponderEliminarMe encanta como redactas y desde este momento te sigo. Te espero por el mío :)
ResponderEliminarUn gran abrazo psicológico!
Hola cielo! Primero muchas gracias por la constancia en el blogg y por todos los consejos que en el ultimo comentario me dejaste. Y segundo me a gustado la entrada, tiene razón pero sobre todo la cama si es nuestro fuerte en el que si mejor lo piensas pasas la mitad de las emociones en ella. Tal vez sea un fuerte en plan caja de pandora, muchas cosas guardadas bajo una llave que jamás podrá abrirse. Un besitoo ♥
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