Reina Roja Jack Escarcha El intercambio Lucía en la noche El Paciente Casi, casi No es mío El jardín del gigante

Reseña | No es mío de Susi Fox

SUSI FOX | NO ES MÍO | AÑO 2018 | 376 PÁGINAS |  SUMA DE LETRAS
ISBN: 
9788491292364 | 2/5 ⭐ | COMPRAR AQUÍ: MEGUSTALEER  AMAZON

Desde que me leí conjuntamente Un extraño en casa (reseña aquí) con Anabel, del blog Libros en familia, quise coincidir con otro blogger para volver a leer conjuntamente y compartir impresiones. Y así ha sido. Desde que Edición Anticipada me mandó un email de que No es mío estaba en papel no dudé ni dos segundos y me lo pedí. Sin saber que mi queridísima Cris del blog Sintiendo sus páginas (lee su reseña clickeando aquí) también lo había hecho así que ya tenía una persona con la que leerlo. Lo que me faltaba por llegar era el libro. Pasó una semana, dos semanas, tres semanas, inclusive un mes desde que lo pedí. Les había llegado a casi todos el libro menos a mi, pero gracias a que contacté con la propia editorial pude tenerlo entre mis manos y volcarme en su lectura. Un libro que me ha durado dos días; pero gracias a que lo leí conjuntamente, porque si de mi hubiera sido habría tardado una eternidad. Gracias Cris por crear en mí esa ansia viva de querer saber lo que ocurre. Porque nos hemos quedado con las patas colgando con esta historia; literalmente.

Gracias a Suma de Letras por el ejemplar
    Portada y título: no me cansaré de decir que soy muy dada a dejarme llevar por las portadas, pero también por los títulos. Y es que este me evocó a una película, que sino has visto no sé a qué esperas, protagonizada por Angelina Jolie El intercambio. En ella se nos cuenta la historia de una madre a la que le cambian su hijo y hacen creer que no está en lo cierto, tomándola por una lunática. Ella luchará con uñas y dientes por demostrar lo contrario, que son los demás quienes no ven la evidencia. Así que sí, en este caso me dejé llevar más por una corazonada que tuve con esa película que por otro aspecto. La sinopsis pintaba bien, pero que equivocada estaba pensando siquiera que esta novela podría estar a la altura de la película. Porque en este caso, además de que los formatos son diferentes, no se parecen ni de lejos. 

    Estructura interna: la estructura no me ha gustado nada. Me ha parecido muy cargante y es que es como si estuviéramos delante de un diario, pero aún más desglosado. Nos cuentan lo que ocurre a lo largo de diferentes días. Donde empieza por el Día 1 y acaba en el Día 7, aunque también tenemos un Día 0; que es digamos lo que ocurre antes del parto de la protagonista que da inicio a la trama en el primer día. Así mismo vamos teniendo flashbacks por parte del marido de la protagonista, en los que nos cuenta, bien situaciones que ha vivido cuando aún no conocía siquiera a su esposa o bien convivencias con ella o con la familia de ésta. Digamos que en ocasiones estos retrocesos no aportan más que una vía de escape a lo que le está sucediendo a Sasha Moloney, nuestra protagonista.
Con respecto a los capítulos son cortos, cosa que se agradece. No obstante, como ya os he comentado están separados por días y estos días por tramos horarios. Estos no tienen una secuencia que se repita; es decir, el Día 1 y el Día 2 no transcurren en el mismo momento, podemos tener un mediodía en el primero y pasar a por la tarde en el segundo. Supongo que será un detalle arbitrario de la propia autora, por lo que no debemos darle mayor importancia. Lo único que algunos días se hacen demasiado largos e interminables y en otros pasamos casi de puntillas, como es en el caso del domingo.

«Las personas no cambian, pequeñas. Solo revelan quienes son en realidad».

    Personajes: hay muchos personajes dentro de la historia, pero los que realmente nos interesan son unos pocos. Sin embargo, haré un repaso por aquellos como el personal sanitario. Tenemos a cuatro imprescindibles que son: el doctor Solomon, la pediatra Green, la psiquiatra Karla Niles y la enfermera Úrsula. Digamos que el peso de la historia recae sobre todo en Úrsula, que es la que está siempre en el ajo y es la que está ojo avizor a cualquier movimiento que haga Sasha Moloney; ya que debe cuidar de ella y de su estado tras la cesárea. Después también nos encontramos con familiares como: Patricia, Ray y Simon, familia por parte de Mark, marido de Sasha; y Bill y Bec, padre y amiga de Sasha. Y para rematar la faena, un nombre que irá repitiendo nuestro personaje principal que es Damien; del que no os revelaré nada, aunque solo os diré que forma parte indispensable en la vida de Sasha. Por último tenemos personajes con los que ésta comparte compañía en el ala de maternidad como: Ondine y Brigitte
Hecho ya este repaso, me detendré en los que nos conciernen que son Sasha y Mark.
Mark, un marido que daría la vida por su esposa. A la que jamás ha hostigado con malas palabras. Con la que siempre tiene su mejor sonrisa y palabras, puesto que ella forma parte de su vida desde que la conoció fortuitamente una noche de fiesta y que se convirtió en una persona muy importante para él. Un hombre que siempre ha querido formar una familia, aunque ha respetado la negativa de su esposa de querer ser madre. El ciudadano que quiere formar parte de la sociedad montando su propia cafetería vegetariana y con platos orgánicos, y que ayuda a todos los animales que encuentre a su paso y que estén heridos ya que forma parte de la tradición que se impusieron él y su esposa dando clases los fines de semana en un refugio de animales. Mark es todo hombre que cualquier mujer querría tener entre sus brazos. No es ningún holgazán, no tiene nunca malas palabras para nadie, siempre intenta evitar las confrontaciones y evadir los problemas poniéndole positivismo y entusiasmo. Es un personaje que nos intentará abrir su corazón contándonos su pasado, pero que mientras su esposa se encuentra hospitalizada se mostrará frío, distante y esquivo. 
Sasha Moloney, es una mujer de armas tomar. Una niña que no tuvo una infancia feliz y una adulta que alcanzará todo lo que se proponga. Sin ir más lejos pasará de no querer oír la palabra madre, a querer sentirla en su vientre. Estudió Medicina, y ello le facilitó las puertas a cualquier especialidad dentro de esta ciencia. Tuvo la oportunidad de ser pediatra, pero una mala praxis le quitará de la cabeza tratar con niños para pasar a hacerlo con signos y síntomas con los que detectar enfermedades. Se convirtió en una patóloga prestigiosa que no se llevaba el trabajo a casa, pero que se encontraba psicológicamente devastada desde lo que le ocurrió hace tiempo. Ello la persigue día, tarde y noche y es lo que la ha mantenido a ralla para decidir no querer ser madre. Sin embargo, sus continuos pensamientos saben que sino lo hace, sino perpetua su apellido puede que pierda para siempre a Mark y jamás se perdonaría eso. Se obsesiona hasta el punto de cambiar su estilo de vida, sus costumbres e incluso se plantea la inseminación in vitro tras los intentos fallidos por conseguir quedarse embarazada. Con su empeño consiguió dos veces su propósito, pero derivó a dos embarazos químicos o, lo que es lo mismo, abortos naturales. Sasha es una mujer persistente, inclusive persuade a su propio marido para buscar métodos más eficaces, pero él sabe que lo que ella tiene traspasa la obsesión y acabará haciendo que enferme, cosa que quiere evitar a toda consta. Sin embargo, las negativas de Mark harán que se obceque más y piense que ella no es como su madre. Ella no consentirá ser la mala madre que abandonó a su padre y a ella. Se siente fuerte, decidida y, sobre todo, tiene mucho amor que darle a su futuro hijo como para rendirse y ceder a los reveses que la vida le está presentando. 


- Que soy la más desequilibrada de todas. Que no merezco que me devuelvan a mi bebé. Que deberían encerrarme de por vida. Lo cual es lo que más deseo, en cualquier caso. - Se queda mirando el lago, por cuyo perímetro corre la gente.

    Trama: la historia se inicia con Sasha en el hospital siendo intervenida de un desprendimiento prematuro de placenta. Ha tenido a su bebé a las 35 semanas, cuando realmente debería haber soportado cinco más para que naciera sano y fuerte. Tanto ella como su marido están contentos de que el bebé haya nacido vivo, pero será ella la que de la voz de alarma cuando al mirar a los ojos a su retoño no encuentre parecido familiar con ninguno de ellos. Está convencida de que el personal del hospital, que no era el suyo pero ha tenido que conformarse con el más cercano debido a la urgencia de su estado, ha cometido una negligencia y han intercambiado a su bebé con el de otra madre. Tanto es así, que se lo confiesa a Mark, a su padre Bill, a su mejor amiga Bec, inclusive acusa a Úrsula, la enfermera que desplazó al bebé de la sala de parto al nido donde su hijo, Tobias (conocido también como Toby, un nombre muy de perro), ha sido permutado por otro. Y aunque Mark quiere creerla, él conoce el historial que la madre de esta aguardó a sus espaldas cuando dio a luz a Sasha. La encerraron en el ala materno-infantil donde fue tratada por unos psiquiatras que la ayudaron a sentirse mejor madre, de lo que ya era tan solo por haberla cuidado durante nueve meses en su vientre, y poder así crear un vínculo afectivo con su hija.
Desde el primer momento que la enfermera tiene un descuido al confundir su nombre con el de otra paciente, Sasha sabe a ciencia cierta que no es una equivocación fortuita; pero, cuando le dicen que ha tenido un niño en vez de una niña, como aparecía en las ecografías que le hicieron en su hospital, sabe perfectamente que la están engañando y haciendo creer que el recién nacido de esa incubadora es el suyo cuando ella tiene la corazonada de que no es así. Su bebé no es el que dicen que es y lo demostrará aunque su salud mental dependa de ello. Acusa a todos aquellos que ayudaron en su alumbramiento e irá todo lo lejos que pueda para demostrar que no está confundida con su intuición de madre pero, sobre todo, de médico que analiza y examina los gestos y el rostro de aquel niño milímetro a milímetro buscando el más mínimo parecido que la haga aferrarse a su pensamiento. Efectivamente no los encuentra y es entonces cuando decide urdir un plan perfecto para poner de vuelta a su hijo.

Quizá Mark está en lo cierto al considerar que no estoy en mis cabales. No obstante, hay ciertos hechos que distinguen mi caso del resto. Yo he estudiado estas cosas. He reconocido a suficientes pacientes como para detectar problemas de salud mentales. Tengo el suficiente discernimiento como para poder identificarlo si me encontrara en apuros, si estuviera paranoica. Y adoptaría medidas al respecto [...] acataría sus órdenes. Por eso sé que tengo la razón a pies juntillas, por mucho que traten de decirme lo contrario.

    Prosa de la autora: en lo que concierte a la parte clínica, Susi Fox, maneja en su totalidad los términos y los explica de una forma clara y sencilla. En este aspecto no hay nada que reprocharle. No obstante, esto no significa que no haya detalles, aspectos o minucias que haya que tenerle en cuenta. En primer lugar desconozco si Fox es una escritora mapa o brújula (lee las diferencias aquí), pero en lo que he leído creo que va un poco por libre. Un ejemplo de ello os lo dejaré a continuación en un apartado de spoiler para que aquella persona que haya leído la novela pueda opinar. Después tenemos también el tema de maquetar el libro con la presencia de capítulos narrados por Sasha y otros por Mark. Ambos, a veces, en presente o pasado según el deseo caprichoso de la autora. En la protagonista no se hace tan evidente ya que va teniendo vaivenes en su memoria conforme transcurre sus acciones en el ala materno del hospital. Este recurso me parece una gozada, pero cuando se utiliza bien. Que de golpe y porrazo estemos leyendo algo que ocurre ahora mismo y nos pasemos a otro párrafo y nos envuelva al pasado, no tiene ni pizca de gracia. Al menos en mi caso, me suelo desviar de lo que estoy leyendo e intento por todos los medios recolocar mis cinco sentidos para enterarme de lo que está ocurriendo. Igual no le ocurre a todo el mundo, pero a mi en particular sí y odio esos flashbacks que se entremeten en la historia sin previo aviso. Los prefiero en capítulos aparte, como es en el caso de Mark.


Mark quiere abrir un negocio, concretamente una cafetería. Recalca mucho la idea de que tenga platos vegetarianos o comida orgánica. Sin embargo, al final de la historia este le dice a Sasha que va hacer socio de un restaurante. Dicho lugar no sigue la política que este lleva defendiendo durante toda la novela. Puesto que en el Día 6. Jueves a media mañana podemos recoger el siguiente fragmento:

[...]el lunes estará de vuelta en la cocina del restaurante, troceando remolacha, preparando chuletas a la brasa, picando hierbas [...].

Es por lo que intuyo que la autora ha tenido algún que otro descuido, aunque yo no he sabido darme cuenta de ninguno más, así que nos animo avisando del spoiler que si os habéis percatado de alguno más lo dejáseis en comentarios para retroalimentarnos de las lecturas los unos con los otros.


    Aspectos positivos y negativos: he calificado este libro con 2 ⭐ en GoodReads - puedes encontrarme como Etérea Sanguez -. Dentro de los aspectos positivos podría recalcar que los capítulos son cortos, pero eso sería daros muy poca información de la que se puede extraer en sus casi 400 páginas. Aunque, como no podría ser de otra forma, la nota os da una pequeña pista de qué es lo que más tengo que contaros y no es precisamente que el libro me haya gustado. Sin embargo, hay que destacar ese final que más que inesperado ha sido para flipar en colorines. En el buen sentido, pero también en el malo. Es algo que se iba barajando a lo largo de la historia pero, ¿que terminase así? Ha sido un chasco y un alivio a partes iguales. Pero vamos, que supongo que eso irá en función de quien lo lea.
Ahora vamos a la parte donde me suelo extender bastante porque aquí hay tela que cortar. Sigo pensando que cuando una novela, que tiene un deje chick lit, está narrada por una autora no puede (debe) dejar al género femenino tan estereotipado y tan en horas bajas. Susi Fox, nos deja como malas esposas y, por consiguiente, madres. Todo por el simple hecho de que parece que la mujer solo tiene una única misión en la sociedad: seguir perpetuando la especie. Y claro, ¿cómo va a hacerlo sola? Hasta el momento nos tenemos que servir de esa parte que solo los hombres pueden darnos. Su esperma. Pero, ¿y sino queremos ser madres? ¿Significa que hemos fracasado como mujeres en nuestro cometido en la Tierra? Este es el mensaje que lanza Fox, prácticamente durante toda la novela. Eso sin contar que, si cuando damos a luz, no creamos un fuerte vínculo afectivo desde el primer momento en el que vemos a nuestro bebé es porque somos malas. Muy malas. Eso de la depresión posparto son fantasías nuestras. No existen, son los padres. Y ahora llega la pregunta del millón, ¿tenemos que ser las mujeres madres a la fuerza o sino nos convertimos directamente en la escoria de la humanidad? Porque si es así, me declaro escoria desde hoy mismo ✋. No creo que el sueño de todas sea serlo, que si es así sería totalmente respetable, pero los tiempos han ido cambiando y puede que nos hayamos hecho egoístas. Ahora vivir por y para nosotras significa ser muy ambiciosa e individualista si miramos más allá de los planes de futuro tradicionales si queremos realizarnos primero profesionalmente. En este punto no voy a extenderme mucho porque mi opinión está clara.

Está claro que no me he documentado lo tocante en las teorías de crianza de los hijos. Esas cosas no se enseñan en la Facultad de Medicina, ni en las prácticas de patología. Ingenuamente, yo pensaba que quedarse embarazada bastaba para formar parte del club de las madres del montón.

Luego tenemos también la división de los capítulos. Al dividir un mismo día en diferentes tramos horarios en vez de ayudar al lector a guiarse durante su lectura lo que ha conseguido, al menos en mí, es querer llegar al próximo para poder así salir de ese bucle en el que estaba metida. No he visto más cosas que le pasan a un mismo personaje a lo largo de 24 horas. Ya quisiera yo estirar así de bien mis días para hacerlos la mitad de productivos que Sasha.
Sin embargo, quitando todo lo demás lo que voy a tratar a continuación no va a ser ni la mitad de importante que lo anterior. Aquí voy a tomar cartas en el asunto porque la incesante utilización de las enfermedades mentales como vía de escape para que la trama se está convirtiendo en lo más casual contribuyendo así a que podamos decir que tenemos entre nuestras manos un thriller psicológico. No tengo ningún tipo de necesidad de leer las gilipolleces (sí, así de dura voy a ser a partir de ahora en este ámbito) que ha escrito Fox. Me niego. Ya me ocurrió con El único recuerdo de Flora Banks y con alguno que otro, pero el que más recuerdo es ese y aquí tenéis la reseña por si queréis leer lo indignada que me encontré en todo momento. ¿Qué necesidad hay de tomar últimamente por desequilibrado a todo personaje que se preste? En mi caso no soy psicóloga, así que no puedo hablar en este aspecto pero me concierne, y no sabéis de qué manera, que una psicosis se trate de un término que se utiliza muy a la ligera. Hay muchos tabús al respecto de las enfermedades mentales, mucha desinformación, y una palabra con una alta connotación negativa que escupimos sin dificultad: loco. ¿Cuándo una persona que tiene una enfermedad mental, que no está en sus cabales, que no diferencia entre el bien y el mal, entre la realidad y la fantasía, ha pasado a convertirse en un loco? Pregunto. Porque para hacer una coña con los colegas ¡ey tío que loco estás! es un término al uso, pero cuando la utilizamos para hablar de una persona que se encuentra inestable psicológicamente no tiene ni puñetera gracia. Y es aquí donde voy a incluiros otro spoiler para aquellos que ya han leído el libro porque de verdad quiero saber vuestra opinión y a los que no os hablaré a pies juntillas sobre lo que ya os he trasladado en la trama. A Sasha la tratan como una enferma mental cuando empieza a manifestar que el niño que se encuentra en la incubadora no es el suyo. No se le hace un estudio previo, no se toma ninguna medida en sus declaraciones y no se intenta razonar de ninguna manera con ella solo con la frase ese hijo es tuyo sin más. Es encerrada en el ala materno-infantil donde se topará con otras madres que también han sido cuestionadas, bien porque la maternidad les ha venido grande o porque la poca ayuda que reciben de su alrededor es mínima y todo el peso del cuidado del bebé recae sobre ellas. Otro punto importante a tratar, ¿nosotras parimos, nosotras decidimos y nosotras que no somos las únicas que ponemos la semillita nos comemos la crianza en solitario? Ya me gustaría a mi toparme con esos hombres que anhelan convertirse en padres y que una vez lo hacen bien desaparecen o se lavan las manos. ¡Ay amigo mío! Cuanta palabrería y que pocos actos. Si cuando dicen que las palabras se las lleva el viento...
En definitiva, a lo que vamos. Sasha y otras mujeres son señaladas y tratadas como malas madres, enfermas mentales que no han sabido acoger la maternidad como un precioso acto para seguir aumentando su linaje. Es aquí cuando me pongo un puntito en la boca y adjunto el spoiler para los lectores de este thriller "psicológico".


Cuando Mark se entera de que Brigitte maquinó un plan junto con Úrsula para realizar el intercambio de bebés, este no le concede a su esposa unas merecidísimas disculpas ni le cuenta la verdad de lo que ocurrió cuando trasladaron a su hijo al nido sino que sigue conviviendo con ambos mientras que el lector sabe que ha sido un mentiroso compulsivo, porque se iba dando un engaño detrás de otro. Así mismo cuando transcurren unos meses, concretamente en el último capítulo narrado por Mark, nos damos cuenta de que él no puede mirar muy alto ya que sigue recordando a su gemelo Simon y hablándole como si este siguiera en vida y se encontrase a su lado. Es decir, sabiendo lo mal que estaba él psicológicamente no quiso darle ni el beneficio de la duda a Sasha sino que decidió, recomendado por el personal médico, encerrarla entre cuatro paredes después de conocer que la propia madre de esta pasó por algo similar durante el embarazo. Aquí es donde podemos percatarnos que además de tratar las enfermedades mentales a la ligera, en la que vemos que no hay un seguimiento de la medicación (si quiera) y que el internamiento voluntario ha durado tan poco a pesar de que la paciente sigue erre que erre con sus conspiraciones, se traslada el pensamiento de que puede ser inclusive hereditario y por ende traspasarse de madre a hijos. ¿Os habéis parado a pensar la insensatez de trasladar al lector estos pensamientos tan ridículos?

    ¿Recomendado?: lo único, para mi gusto, que salva al libro es su final. Sin embargo, vais a tener que soportar la friolera de más de la mitad del libro hasta llegar a él así que siendo sincera no lo recomiendo. Hay thrillers que le dan una patada a este y con los que verdaderamente estaréis intrigados de saber lo que ocurre con los personajes. En este caso la acción se ha ido dando muy pausadamente, la autora más que jugar con el lector lo que ha estado haciendo era mareándolo para que, supuestamente, al llegar al final le sorprendiera lo que ocurre. Ni mucho más lejos de la realidad. Bien es cierto que es un buen final, pero tampoco para ponerte a dar aplausos con los pies. Algo normalito, que no se sale mucho de la norma.

En definitiva, No es mío es una novela llena de enfermos patológicos que no hacen más que mentir constantemente sobre su pasado, presente y futuro. Una protagonista, a la que toman por inestable, que promete conseguir su objetivo, secuestrar a su verdadero hijo, y hacer que todos los demás vean que no estaba equivocada y que sus pensamientos eran puros al cien por cien en todo momento, aunque su propio marido y el personal sanitario vieran una imagen totalmente distorsionada de la paciente. Un intento de novela intrigante que ha ido derrapando hasta convertirse en previsible.

¿Qué opinión tenéis sobre la maternidad?


16 comentarios:

  1. ¡Hola!

    La verdad es que no me atrae nada la temática del libro y es una pena que no te haya gustado demasiado, pero bueno, es lo que tiene leer: a veces son buenos libros y a veces malos, es un todo incluido. La verdad es que este tipo de tramas de misterio no me van, y como la maternidad por ahora me es un poco indiferente...

    ¡Nos leemos!
    Lua.

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    1. Como te entiendo Lua. A mi me llamó la atención porque, como ya digo me recordaba a El intercambio, pero dista mucho de lo que hay en el libro. Se me ha hecho pesado, porque los capítulos, aunque cortos, se separan por días y estos por tramos horarios así que parecía que ese día no iba a acabar nunca.
      Sobre lo que he aprendido de maternidad, una enseñanza más.

      ¡Gracias por comentar!

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  2. Hola. Jajaja, yo soy médica y no puedo contarte la cantidad de veces que me ha tocado cuando un paciente se psicotiza... y es de lo peor. Porque hay pacientes tan bien mentirosos, o con una labia tan hábil que cuando ya te estás creyendo lo que dice, llega alguien con pruebas o argumentos o testigos encontra y ¡pum! Te das cuenta que efectivamente el paciente no está en sus cabales. Amm... no sé si leería este libro, pero me entró la curiosidad: ¿siempre sí cambiaron a su hijo? ¿o en efecto estaba psicótica? ¿Tipo DiCaprio en la Isla siniestra (Shutter Island)?
    Gracias por la reseña, saludos♥

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    1. ¡Me encantó esa película!

      No puedo desvelarte más de libro de lo que has leído, sino sería spoiler y para ello ya están los acordeones donde introduzco mayor información para quienes hayan leído el libro. Sin embargo solo te diré que nada es lo que parece.

      ¡Gracias por el comentario Less!

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  3. Hola!!
    Gracias por tu reseña, tengo pendiente este libro.
    Me gusto mucho tu blog, seguire por aqui.
    Besos💋💋💋

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    1. ¡Bienvenida Ella!

      Me alegro mucho que te quedes por aquí, estaré encantada de leer tu reseña sobre el libro y saber qué te ha parecido.

      ¡Un besín!

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  4. Ay querida, cuánto hemos reido y sufrido con esta novela. Yo me lo pasé genial leyéndola contigo conjuntamente, siento haberte creado esas expectativas tan buenas porque me estaba enganchando mucho al principio. Qué decepción de personajes, de trama, de relleno de capitulos de MArk, sin sentido. Ese sería mi resumen, es una novela con trama sin sentido ninguno. El final es sorprendente, sí, pero para muy mal jajajajaja, es uno de los peores finales que he leido hace mucho tiempo.

    En fin, chata, poco más podemos añadir, este libro pasará a nuestra colección de lecturas conjuntas fracasadas, espero que el siguiente sea muchísimo mejor,tampoco es muy dificil oye.

    Un besazo

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    1. ¡Ay Cris!

      No sé si te has dado cuenta pero estamos abocadas al fracaso. Las dos veces que hemos leído conjuntamente un libro la cosa ha ido de mal en peor jajajaja. Tendríamos que plantearnos leer libros infantiles juntas xD

      ¡Un besazo corazón!

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  5. ¡Hola!
    Acabo de pasar por otro blog donde vi este libro, a diferencia tuya la reseña lo pintaba muy bien. Aunque me llama la atención creo que esperaré un tiempo para ver que más se dice al respecto de el. Justo en este momento de mi vida no pienso mucho en la maternidad, deseo hacer otras cosas antes de plantearme la idea de formar una familia, pero siempre he creído que la maternidad debe ser totalmente deseada.
    Saludos infinitos.

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    1. Soy consciente Rebeca de que este libro tiene muy buenas críticas, cosa que no entiendo. Hay citas que ponen los vellos de punta y actitudes que dejan mucho que desear si yo he sido capaz de verlas y distinguirlas no entiendo porque no todo el mundo lo hace. De hecho, hay de vez en cuando micromachismos como 'perder a su marido por no querer ser madre', pensamiento que horripila; al menos a mí. Espero que sí tienes la oportunidad de leerlo lo reseñes y pueda saber tu opinión sobre él y ;)

      ¡Gracias por tu comentario!

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  6. Éste es de esos libros que en cuanto vi tuve que hojear porque parecía de mi estilo, y me recordó bastante a las novelas de Shari Lapena aunque la última me decepcionó bastante... de hecho, por eso dudé entre leerlo o no, porque temía llevarme otro chasco como con aquel. Y mira por donde, parece que no andaba muy desencaminada. Historia de un "quiero y no puedo" que promete las mieles y finalmente se desinfla sin gracia y llena de tópicos, pues vaya. Además, ODIO cada vez que menosprecian las enfermedades como la depresión, que tener depresión posparto no te hace ni mala madre ni mala persona, que cada cual tiene sus afecciones y hay que ayudar en lugar de fustigar como si fuéramos villanas. Y totalmente de acuerdo contigo, ¿Si no tienes hijos, eres un desperdicio de oxígeno? Porque hay mujeres que no quieren tenerlos, en serio. Y otras que aunque quisieran no pueden, bien son estériles, quizá trans, hay miles de vidas e historias y no somos nadie para juzgarlas imponiendo la ley del pareja-matrimonio-hijos. ¡Que existimos también como individuos, coñe! Con tanta presión casi hasta se normaliza que haya enfermedades mentales, pero parece que aún se toman muy a la ligera. Y tampoco me parece agradable la forma en que se representa en ésta novela, la verdad. Vuelve a mofarse de lo que realmente es una enfermedad, y seria.

    Mira que me gustan los thrillers, you know. Y sufrir con una lectura pues también, pero no de ésta manera. Sufrir disfrutando, así de masoca soy. Ésto creo que me pondría de muy mala leche así que mejor ahorrarme disgustos.

    Un beso!!!

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  7. Hola bonita!
    Puf, tengo muchas dudas con este libro. Por un lado me intriga leerlo, la temática me parece buena y me ocurre igual que a ti, me dejo llevar mucho por la premisa y la portada. Por otro me echa para atrás varias cuestiones...entre ellas que no esté bien planteado en términos de estructura, eso me da bastante pereza y si lo más interesante es sólo el final, puede que la historia me resulte algo pesada.
    Me encantan los thrillers pero escogerlos me cuesta bastante, porque o son muy buenos o son muy muy malos. Si es predecible al final, más me echa para atrás. No sé, me lo pensaré...tras leer tu reseña creo que lo dejaré pasar y daré paso a otros thrillers que parecen ser más interesantes y menos tediosos.
    Gracias por la reseña tan sincera y completa, me encanta leerte.
    Un beso enorme :)

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  8. ¡Hola! ^^
    Pues parece que en casi todos los blogs está gustando mucho este libro, pero está claro que para gustos los colores. Me llama bastante la sinopsis, pero en estos momentos no me apetece nada leer ni thriller ni novela negra. Ahora mismo estoy a tope con el género romántico xD
    De todas formas no lo descarto, aunque no esperaré mucho de él.
    Besos!

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  9. Hola guapísima!!
    De toda tu reseña solo me llevo el título de la película de Angelina Jolie, me lo apunto enseguida para ver xD!
    No me gustan los personajes que mienten... o sea, esto lo he visto en series sobretodo y me parece un comportamiento súper estúpido...
    Este no es el tipo de libro que quiero leer ahora^^jeje así que de momento paso, pero muchas gracias por tu reseña!!
    Nos vemos,
    besitos

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  10. Hola! veo que no estoy sola en esto de que la novela fuera una decepción. Soy también una escoria humana, qué le vamos a hacer, aunque esa parte no la vi tan "exagerada" porque de verdad que hay mujeres que van de tratamiento en tratamiento y de clínica en clínica hasta quedarse embarazadas y si no lo consiguen se sienten unas fracasadas. Es una pena que eso sea lo que se nos meta a presión en la cabeza desde pequeñas. Los personajes no me gustaron nada, la trama se me hizo lenta a ratos y a otros un poco insoportable y, para mi gusto, solo se salva el matrimonio, como describe la relación entre la pareja y poco más. Besos!!

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  11. Ni siquiera me gustan los thrillers así que este definitivamente lo dejaré pasar...
    Besoos

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