Educapeques | Jack Escarcha de Kazuno Kohara

KAZUNO KOHARA | JACK ESCARCHA (Jack Frost) | AÑO 2015 | 32 PÁGINAS |  PICARONA
ISBN: 9788416117147 | 5/5 ⭐⭐⭐⭐⭐ | COMPRAR AQUÍ: PICARONA  AMAZON

Hace ya un tiempo que no subo una reseña para la sección de Educapeques y como dentro de nada seguro que estáis pensando que poder regalar a vuestros pequeños. Como favor personal os pido si tenéis un pequeño rondando por vuestro entorno ya sea hermano, primo, sobrino o un vecino adorable al que queráis alegrarle ¡Regaladle un libro! No tiréis a lo fácil y lo sencillo: tecnología. Les hace más mal que bien y donde se ponga un libro que se quite todo lo demás. Así que aquí tenéis una de tantas ideas que os iré trayendo a lo largo de estos meses porque pienso llenar el blog de reseñas LIJ.

Kohara es una autora e ilustradora japonesa que reside actualmente en Reino Unido. Actualmente tiene cuatro obras publicadas: Ghosts in the House! (2008), Here Comes Jack Frost (2009), Little Wizard (2010) y The Midnight Library (2014). Sus libros destacan principalmente por el uso de la técnica del linograbado - conocido también como linóleo y patentada en 1860 por Frederick Walton, se trata de una técnica artística de estampación en relieve que se utilizaba principalmente para el revestimiento de suelos - en uno o dos colores.

Os dejo las reseñas de sus otros libros: El pequeño mago, La biblioteca nocturna y  La casa encantada
- clickea encima de cada título -

Esta historia está protagonizada por un niño, del que desconocemos el nombre (como suele ocurrir en todos los otros libros de Kohara), que se siente solo puesto que ha llegado el invierno y sus amigos están hibernando. En el libro no aparece más que la compañía de un perro, del cual tampoco conocemos su nombre y tampoco se le da mucha importancia a su presencia simplemente acompaña al niño y se une a cada una de sus acciones.
Sin embargo una mañana, al asomarse por la ventana, se da cuenta que fuera de casa hay una extraña figura por lo que decide salir de sus cuatro paredes y aventurarse a descubrir de qué se trata. Es nada más y nada menos que Jack Escarcha, una representación que la autora ha creado para darle nombre al invierno, que se ha dedicado a llenar el entorno del pequeño de nieve. De hecho este intenta escapar pero es el niño el que pone toda su atención en él y le persigue patinando por el estanque de hielo y saltando una montaña con su trineo para terminar jugando con este a lanzarse bolas de nieves y disfrutar de su compañía durante todo el invierno, pero para ello el niño tendrá que hacerle una promesa a Jack Escarcha para que este no desaparezca de su vida para siempre; ¿cuál creéis que será?

Se trata de una historia que a pesar de ser cortita, como todos los libros de la autora que disponen de la misma extensión, para los amantes del invierno será una gozada leerlo y disfrutarán de sus páginas de principio a fin. Además, sacándole ese lado educativo que a mi tanto me gusta y que a veces me cuesta pero los libros de Kazuno se prestan siempre a extraer valores y principios en este caso también me gustaría destacar que me ha venido como un flash una actividad que se podría hacer con los alumnos o pequeños en general. Se trata de partir de esta figura de Jack Escarcha para explicar las estaciones del año. Incluso podríais, después de explicar las diferencias entre ellas, trabajar su lado más creativo (porque no hay que dejar de trabajar el hemisferio derecho que es el del sentido artístico e imaginativo) creando un personaje para cada una de las épocas. ¡Seguro que salen verdaderas obras de arte! Y a partir de ahí también se podría explicar un poco el tiempo meteorológico sin caer en tecnicismos que para ellos suenen a chino mandarín, por ejemplo: ¿por qué nieva? ¿por qué caen las hojas de los árboles en otoño? ¿qué es el sol? Y partiendo de ahí se pueden explicar muchísimas más cosas pero a mi solo se me ocurren estas dos. Si tú tienes otras actividades en mente que podrían llevarse a cabo tienes el apartado de comentarios para iluminarnos a todos.

Puestos ya a tono vamos a ir con los valores y principios intrínsecos o extrínsecos que he podido deducir de la historia que nos regala Kohara. Siempre vengo con fundamentos teóricos, pero no es fácil a la hora de leer un libro infantil sacar la parte emocional que tengo como educadora. No obstante, voy a ser lo más objetiva posible a la hora de compartiros mis impresiones de Jack Escarcha:

  📌 Soledad: que os quede clara esta frase, grabaosla a fuego o como queráis, los niños están programados para jugar. Eso es así en Europa, Asia, América, África, Antártida y Oceanía. Hasta los pingüínos y osos polares recién nacidos juegan. Así que, ¿cómo tener a un niño encerrado entre cuatro paredes durante todo el día? Inviable. Inclusive hay una antropóloga, Noemi Paymal, que manifiesta que el niño el niño tiene que moverse cada 20 minutos en Primaria y si es más pequeño tiene que hacerlo todo el tiempo. Decirles que no se muevan es como pedir a la planta que no crezca o al sol que se pare. Igual aquí no nos interesa mucho el tema de los niveles educativos porque siempre podemos extrapolarlo al tiempo libre del niño. Podríamos decir que el sentimiento de aburrimiento, ante la soledad, que expresa es totalmente lógico y comprensible.

  📌 Interés ante lo desconocido: no he visto mayor atractivo y aliciente para un niño que lo que no conoce. Cuando pasan por la etapa del por qué no dejan de estar igualmente de interesados (obviamente por lo que les conviene) por aquello que les atrae. Ya puedes aburrirte tú antes que él en conocer todo aquello que sea nuevo para ellos.

  📌 Fuera los prejuicios: la versatilidad con la que trabaja Kohara hace de sus libros ejemplares especiales. Lo mismo te presenta una bibliotecaria a la que la ayudan unos buhos, que a un niño con un dragón o a una niña haciéndose amiga de los fantasmas. En este caso nos encontramos con un pequeño protagonista que más lejos de asustarse de alguien desconocido, y muy diferente a él, se acerca a él con el propósito de conocerle. Como ya he dicho ponle a un niño algo desconocido delante y sus ansias de amistarse con todo aquello que le rodea y de ello saldrá una amistad; verdadera o no ya es otra cosa. Muchas veces y ya lo dijo César Bona en un capítulo de La emoción de aprender (que publicaré más adelante en mi nueva sección Educacciónate): las actitudes se aprenden [...] toma nota de que ese modelo de comportamiento es el correcto. A veces tenemos un, como él lo llama, odio heredado que no nos deja ver más allá de nuestras pestañas. Tenemos que salir como el niño y ver mundo, o conocer a los que viven en él.

  📌 Amistad: las relaciones entre pequeños siempre se forjan para la amistad. Cuando tenemos cortas edades no nos cuesta lo más mínimo entablar conversación o jugar con cualquiera. Tenderle la mano a alguien que no conocemos es nuestro talón de Aquiles. Sin embargo, conforme crecemos nos cuesta mucho más dar nuestro brazo a torcer si esa persona no tiene los mismos gustos que nosotros. Porque no sintonizamos con ella o bien porque, al hilo de lo anterior, estamos llenos de prejuicios. En este caso aunque Jack Escarcha aparente ser más mayor que el niño nada le impide en convertirse en su amigo y jugar con él durante el invierno.

  📌 Carpe diem: los planes inesperados son los mejores y es que nuestro pequeño protagonista pasa de estar encerrado en casa mirando a través de la ventana a verse fuera jugando con Jack Escarcha. Lo que no está planeado, que surge de la propia paciencia son prácticamente los que mejores recuerdos nos dejan. Y puede que quizá los que más disfrutemos. Independientemente de que pueda salir mejor o peor. O de que el resultado de esa idea inicial no sea el que esperábamos. Dicen que no es el lugar, es la compañía y estoy totalmente de acuerdo porque este niño se lo pasa pipa prácticamente en cualquier parte de la nieve mientras sea con su peludito y su nuevo amigo.

  📌 Respeto: como ya os he avisado antes Jack le pide al niño que le haga una promesa. Es muy importante que cumpla su palabra y es que aquí el respeto está en su máximo esplendor. A veces nuestra lengua corre más deprisa que nuestro cerebro y es ahí el momento culmen en el que metemos la pata a fondo. No os desvelaré si este la cumple o no, lo que está claro es que cada uno de nosotros nos vemos reflejados en él porque posiblemente a veces hemos hecho un gran trabajo de silencio y de mutis por el foro para no irnos de la lengua. Todos tenemos un secreto y seguramente cuando lo hemos compartido con alguien le hemos hecho jurar y perjurar que no se lo contará a nadie. De igual manera ponemos todas nuestras esperanzas y confianza en esa persona porque verdaderamente creemos que es alguien que nos aporta esa seguridad que no lo haría otra cualquiera. Así que sí, la base de cualquier relación es el respeto bien sea entre conocidos y más siendo entre desconocidos.

Como siempre estos son los que yo he encontrado pero debajo me podéis decir qué es lo que creéis, en base a lo que os he contado, que podemos encontrar más dentro de este ejemplar. Soy toda oídos y entre todos podemos sacarle más chicha y limoná a este cuento.

¿Conocíais a la autora?

¿Habéis leído algún libro de Picarona?
¿En qué valor creéis que cojea más el ser humano?

 ¡COMÉNTAMELO!