Reseña | Una chica desconocida de Mary Kubica

MARY KUBICA | UNA CHICA DESCONOCIDA | AÑO 2017 | 368 PÁGINAS
HARPERCOLLINS | ISBN: 9788491390763 | 5/5 ⭐⭐⭐⭐⭐ | COMPRAR AQUÍ: HARPERCOLLINS AMAZON

Cuando supe que Mary Kubica iba a publicar de nuevo con HarperCollinsIberica me quería morir del entusiasmo por leerla. Quienes me conocéis sabéis que os recomiendo incesantemente Una buena chica, que fue el primer libro que me leí de ella y del que podéis leer su reseña clickeando aquí.

El que la sigue la consigue y hasta que no me hicieron el regalo de este libro por mi cumpleaños no paré de quererlo/desearlo/soñarlo una y otra vez. Sabía que me lo regalarían pero en el caso de no hacerlo me lo habría comprado yo misma.
Una vez llegó a mis manos no pude parar de leer, pero bueno ahora mismo no os voy a desvelar mucho así que...

    Portada y título: somos conocedores de que en las portadas de Kubica aparece una mujer en el plano principal. En este caso lo que recubre a la protagonista es mucho más tenebroso. Está como envuelta en un manto negro. Le viene como anillo al dedo porque la historia de la que será una de nuestras protagonistas es muy cruda. 
El título invita a que pensemos que se tratará de una chica pero el adjetivo desconocida nos da un gran margen de error, no obstante conoceremos de quién se trata nada más empezar la novela. 

Últimamente me cuesta tan poco mentir... Me sale de manera natural, automáticamente, hasta el punto de que ya no distingo qué es verdad y qué es ficción.

Heidi

    Estructura interna: el ejemplar consta de una serie de capítulos, que no están enumerados pero que al contarlos se tratan de 57. No dispone de epílogo ni prólogo. Unos son narrados por nuestra protagonista Heidi, otros por nuestra otra protagonista, Willow, que casi que diría que es en la que más se centra la historia y por Chris, marido de Heidi. No son largos, pero hay algunos que tienen más páginas que otro porque lo que se narra, cuenta u ocurre lo requiere.
En Una buena chica cuando un protagonista hablaba siempre venía acompañado debajo por la palabra antes o después. Esta publicación en particular está desprovista de alguna pista antes de comenzar el capítulo; cuando te ves envuelto en él te das cuenta de lo que se narra es una hazaña en pasado o en el presente. No es un detalle que echase muy en falta, pero si que es verdad que ese recurso en el otro libro lo agradecí bastante. 

    Trama: Heidi encuentra a Willow, una adolescente de 16 años, con una niña de meses en brazos en una estación. Siempre las encuentra con las mismas vestimentas, con una maleta acuestas y con una apariencia que cualquier persona que estuviera cerca de ella vería con malos ojos. 
Heidi trabaja en una ONG en la que ayudan a las personas más necesitadas: personas sin techo, extranjeros, familias con pocos recursos, etc. En el ADN de nuestra protagonista residen las cualidades: solidaria, humana, empática, etc... Todas las buenas palabras que puedas llegar a imaginarte así que, junto con un drama del pasado que la dejó tocada para toda su vida. Se siente con el placer, más que en la obligación, de ayudar a Willow y a Ruby, la niña que tiene en sus brazos, a pesar de que Chris ha estado luchando con su esposa para que tanto la adolescente como el bebé salieran de casa rápidamente pues, como os he comentado, el aspecto de ambas no era el más favorable. Básicamente vagabundeaban buscando un lugar en el que resguardarse de las incesantes lluvias que azotaban la ciudad un días tras otro. El marido de Heidi ve como una amenaza constante a Willow, tanto que Zoe, la hija de los Wood, Chris y su esposa duermen bajo llave en una misma habitación con la intranquilidad de que a media noche la desconocida se levante y les arrebate todas y cada una de sus valiosas pertenencias. 
Lo que fue un acto de bondad, realizado por nuestra solidaria Heidi, fue convirtiéndose un día tras otro en una obsesión, que estaba acabando con su cordura, evocándole la concepción de su segunda hija Juliet. Ruby, el bebé de Willow, le recordará diariamente a su otra hija e intentará desesperadamente arrebatarle la niña a la desconocida. 

¿Es el comportamiento propio de una persona que ha sufrido maltrato?, me pregunto mientras miro de reojo el pelo desordenado con que se cubre parcialmente la cara. ¿O más bien de quien ha maltratado a otros? Esa mirada turbia y sombría, la malicia con que observa a Chris y a Zoe, y a mí, ¿son un efecto del maltrato o un indicio de su conducta agresiva? Observo a la gente fijarse en la chica sentada a mi lado con el bebé en su regazo, la chica con la mirada perdida, teletransportada mentalmente a alguna esfera lejana, fuera de este vagón abarrotado [...]

Heidi

    Personajes: si os hablase de otros que no fueran Heidi y Willow estaría dejándome muchos cabos sueltos. Lo que sí os haré es un breve recorrido por todos y cada uno de los personajes que aparecen intentando no spoilearos sobremanera.
El matrimonio de Heidi y Chris se va desmoronado. Cassidy, la secretaria de Chris, es una joven atrevida que tiene ciertos acercamientos con él a los que este no le hace ascos. No obstante, Heidi también se ve filtreada por Graham, vecino del bloque, por lo que sentirse deseada por otro hombre le encanta, a pesar de que sea tajante con su marido y la relación con su secretaria. Hecho que no para de recordarle una y otra vez nuestra protagonista cada vez que se da el caso (por ejemplo cuando Heidi llama al despacho de Chris y Cassidy es quien coge las llamadas). Luego nos encontramos con Zoe, a la que sino hubiera aparecido en toda la historia tampoco habría echado de menos.
La vida de Willow, de la que no os desvelaré un secreto que cambiará prácticamente toda la trama, es mucho más despiadada. Ella y su hermana Lily se quedaron huérfanas cuando sus padres murieron en un accidente de tráfico. Cuando esto ocurre ambas son internadas en un hogar de acogida para niños huérfanos. Ambas no fueron adoptadas por la misma familia. Lily se fue con la familia Zeeger, que no podía tener hijos y no tuvieron más remedio que optar por la adopción, y Willow por una familia cristiana Abrahamson, formada por cuatro miembros Joseph, Miriam y sus hijos Matthew e Isaac. Sin embargo, estos no se portaron con ella como merecía. La tenían como una criada, encerrada entre cuatro paredes, no iba a la escuela, aunque siempre engañaban a Amber Adler, la trabajadora social que le buscó adoptantes tanto a ella como a su hermana y que quería lo mejor para ambas.
También aparece otro personaje femenino, Louise Flores. Solo os puedo decir que es la A.F.D (ayudante del fiscal del distrito) y hasta ahí puedo leer.

De un momento a otro me convertí en una huérfana. Había tantas cosas metidas dentro de esa palabra: la lástima con que me miraba la gente, su manera de mirar mi ropa, ropa barata que siempre me quedaba pequeña, donada por asociaciones benéficas, heredada de niños a los que ya no les servía, como tampoco me servía a mí.

Willow

    Pluma de la autora: Deciros que Kubica es, actualmente, mi autora de thriller favorita sería quedarme corta. No he leído todas sus novelas, porque algunas aun no han sido traducidas al español, pero os puedo asegurar que libro que salga a la venta libro que me compraré. Y no en digital, sino en físico. Porque quiero tenerlos todos. Porque Mary Kubica no estará a la altura de Mary Higgins Clark pero está pisando fuerte y viene cargada de intriga y suspense.
No sé que tiene la pluma pero te envuelve y te atrae hasta que no puedas evitar la tentación de finalizar la novela. En los capítulos sabe la dosis que tiene que darle al lector para que quieras leer más y más, y no puedas cerrar el libro quedándote con la intriga de saber qué ocurrirá en el siguiente.

    Aspectos positivos y negativos: he calificado a este libro con 5 ⭐ en GoodReads - puedes encontrarme como Carol Sanguez -. Os mentiría si dijera que no tengo nada que reprocharle al libro. Se me ha hecho pesado en algunas partes y Heidi, para mi, ha sido insoportable. Los capítulos que estaban narrados por ellas donde salía a relucir su obsesión por Ruby y su trauma como madre se me ha hecho muy cuesta arriba. También me han sobrado algunos que otros capítulos narrados por Chris, cuando llegaba a él solo quería pasarlo rápidamente. Se podría decir que quien ha conquistado mi corazón es Willow, pero también os engañaría. Quien ha sido mi personaje favorito con diferencia es Matthew, quienes hayan leído el libro lo entenderán y quienes no ¡NO SÉ A QUE ESPERÁIS!
Lo positivo de leer siempre a Kubica es como cuando veo una temporada de How to get away with murder me imagino miles de hipótesis y al final se le da un giro bestial que tira por tierra todas tus conjeturas. Es por ello que os digo que la comparación de Higgins Clark y esta autora no está hecha a la ligera sino que ambas te cuentan una historia, te lo ponen en bandeja de plata y, cuando va llegando el final, se las ingenian para hacerte lo blanco de color negro. En sus novelas no hay una gama de grises.

Matthew se quedaba solo unos segundos, como mucho, y me daba algún dato que a mí en realidad me importaba un comino y seguramente a él también. Pero yo me daba cuenta de que lo importante no era lo que me contaba: era el pacto, el vínculo.

Willow

    ¿Recomendado?: recomendártelo es poco para todo lo que te podría decir sobre este libro. Vas a encontrar de todo: engaños, amor, obsesiones, sobreprotección, desobediencia, traiciones, apego,... Un mix de eso y mucho más en escasas 368 páginas.

Pero la niña... La niña, en cambio, era toda sonrisas. Sonrisas desdentadas y tiernos gorgoritos de bebé que llenaban la habitación como nanas espumosas. Me aferré a ella con avaricia, no quería compartirla con nadie.

Heidi

En definitiva, Una chica desconocida se trata de un libro en el que encontraremos a unos personajes a cada cuál más complejo, con una vida reveladora a sus espaldas, una más aterradora y cruel que la otra. Donde las inseguridades serán el plato principal, de cada uno de ellos, y en el que las mentiras juegan un papel significativo transformando, incluso, la propia identidad en busca del propio interés.