KAZUNO KOHARA | EL PEQUEÑO MAGO (Little Wizard) | AÑO 2015 | 32 PÁGINAS | PICARONA
ISBN: 9788416117154 | 5/5 ⭐⭐⭐⭐⭐ | COMPRAR AQUÍ: PICARONA AMAZON |
Con motivo de Halloween y aprovechando que la editorial Picarona - a la que desde aquí les doy las gracias por cederme otro libro de Kazuno Kohara - me mandó este precioso ejemplar creo que es hora de hacer otra fotoreseña. Ya me dijísteis que os gustaba así que como me gusta hacer caso a vuestra peticiones y teneros contentos ¡Allá vamos!
Antes de nada os voy a dejar por aquí mi otra fotoreseña de La Biblioteca Nocturna, también de Kazuno Kohara por si queréis echarle un vistazo. Seguro que os encanta 😘
Antes de nada os voy a dejar por aquí mi otra fotoreseña de La Biblioteca Nocturna, también de Kazuno Kohara por si queréis echarle un vistazo. Seguro que os encanta 😘
Gracias a Picarona por el ejemplar
Kohara es una autora e ilustradora japonesa que reside actualmente en Reino Unido. Actualmente tiene cuatro obras publicadas: Ghosts in the House! (2008), Here Comes Jack Frost (2009), Little Wizard (2010) y The Midnight Library (2014). Sus libros destacan principalmente por el uso de la técnica del linograbado - conocido también como linóleo y patentada en 1860 por Frederick Walton, se trata de una técnica artística de estampación en relieve que se utilizaba principalmente para el revestimiento de suelos - en uno o dos colores.
Os dejo los enlaces de los otros dos libros: La casa encantada y Jack Escarcha - clickea encima de cada título - |
Ahora que ya sabemos un poco más sobre la autora y cómo crea sus historias vamos a lo que nos interesa que es conocer el contenido del libro, tanto las ilustraciones, que veréis a continuación, como de lo que trata El pequeño mago. Podéis leer las primeras diez páginas del libro haciendo click aquí. Yo solamente os muestro algunos ápices de su interior ya que con tan poquitas páginas no puedo mostraros más.
En El pequeño mago nos encontramos con un aprendiz de mago que intenta aprender a montar en su escoba mágica sin tener éxito. Un día decide marcharse de la Academia de Brujería y adentrarse en El bosque oscuro para despejarse un poco y poder así practicar más tranquilamente sin sentirse presionado por los otros magos, que le aislaban constantemente por no saber volar en la escoba.
Sin comerlo ni beberlo, se da cuenta que sobre su cabeza se encuentra volando un dragón y, ¿qué mejor ser para enseñarle a volar que este? El mago se aventura a preguntarle a este si le ayudaría a aprender a montar en su escoba y, como no podía ser de otra manera, el dragón le da un sí por respuesta. Son innumerables veces las que el mago intenta alzar el vuelo pero, aunque el dragón le apoya una vez tras otra, sigue sin conseguirlo; ¿creéis que conseguirá nuestro pequeño mago aprender a volar? Os invito a que leáis el libro para saber si lo consigue o no y de qué manera.
Nuevamente, en este libro de Kohara, se nos priva de conocer cuál es el nombre del protagonista y su compañero pero, creedme cuando os digo, que no echamos de menos ese pequeño detalle. Básicamente porque en esta ocasión solo disponemos de tres personajes y ninguno de los otros es ningún otro mago ni dragón así que no tenemos problemas para saber quién es quién.
Cuando finalicé la lectura del cuento me quedé con un gran sabor de boca porque entre sus páginas encontré un gran sentimiento de superación personal; algo que hay que enseñarle a los niños. A no rendirse nunca y a perseguir sus sueños cueste lo que les cueste. Obviamente, como todo ser humano, no somos perfectos y tendemos a marcarnos metas que a veces son difíciles de alcanzar por más que lo intentemos, pero nada en esta vida es imposible. Esa etiqueta de imposibilidad nos la colocamos nosotros mismos cuando queremos conseguir algo así que ¡HACEROS INMORTALES CAZADORES DE SUEÑOS! Ya sabéis que sacarle el lado educativo a estos libros para mi sí que es imposible así que, siempre respetando el final del libro, voy a trasladaros cuáles han sido los valores que yo extraigo del libro.
📌 Perseverancia: cuando el pequeño mago se marcha de la Academia de Brujería no es porque haya tirado la toalla, ni mucho menos. Él quiere seguir practicando pero lejos de un lugar donde se siente desplazado y el hazmereír de sus compañeros por no haber aprendido aún a volar en su escoba. Cuando se encuentra con el dragón, el mago le pide ayuda por lo que como podéis comprobar nuestro protagonista tiene muchísimas ganas de aprender y no tira la toalla bajo ningún concepto. Este aspecto es el que más me ha gustado y que he percibido a lo largo de todas las páginas. Creo que el valor de la perseverancia y de no postergar nuestros deseos es fundamental.
📌 Sentimiento de aislamiento: ya os he dicho que el pequeño mago se sentía aislado y rechazado por sus otros compañeros magos porque este aún no sabe volar en la escoba, ¿cuántos de nosotros no nos hemos sentido así alguna vez porque no hemos sabido aprender al mismo ritmo que los demás? Seguro que todos en algún aspecto de nuestra vida. En mi caso por ejemplo fue esquiando hace aproximadamente diez años. Nos fuimos a Sierra Nevada, porque ganamos un concurso contra el SIDA en mi instituto y nos dieron cierta cantidad de dinero que la destinamos a ese viaje, a esquiar durante unos dos o tres días. Como sabréis, y si no lo sabéis os lo digo yo, lo fundamental para deslizarte sobre una cuesta es saber hacer la cuña - cruzar los esquíes para frenar - bueno pues yo no aprendí. ¿Me hace eso peor que los demás? Para nada, porque cada vez que me caía me quitaba los esquís y me los volvía a colocar, o sea que ¡SOY LA QUE MEJOR SABÍA ABROCHARSE LOS ESQUÍS!
📌 Compartir: de esta parte no os he hablado pero cuando el pequeño mago se cansa, por así decirlo, y se hace muy tarde el dragón le invita a su casa a comer y este comparte sus alimentos con nuestro protagonista. ¡Qué importante es saber compartir! Además que comparten un valioso tiempo que le hace ser amigos para siempre. ¿Sabéis lo valioso que es que alguien dedique parte de su tiempo en estar con vosotros? Es algo que no vuelve, la comida siempre está ahí pero el tiempo una vez transcurre no podemos volver hacia atrás y recuperarlo. Si alguien te dedica su tiempo siéntete agradecido con esa persona porque te está regalando algo que nunca podrá volver a tener.
📌Refuerzo positivo: no es que os lo tenga que decir yo para que sepáis la importancia de alegrarse por alguien cuando hace algo bien. Estar constantemente mandándole mensajes y refuerzos positivos. Alegrarse por el prójimo es lo mejor que podemos hacer. Les ayuda tanto a ellos como a nosotros mismos. Dejamos a un lado la envidia, que tan poco sana es, y sabemos reconocer cuando alguien hace algo bien. No es que sean mejor que nosotros, porque grabaos a fuego que nadie es mejor que nadie; pero cuando haces algo bien ¿a que nos gusta que nos lo reconozcan? Sin ir más lejos el otro día me tocó en clase leer un texto en inglés y cuando terminé una compañera me dijo que qué bien leía en inglés. Un acto tan simple me alegró el día, simplemente porque sé que soy nefasta en este idioma en cuanto a gramática y oído se refiere pero jolines si sé leer bien en inglés es porque lo estoy haciendo cada día mejor y me estoy superando. ¡Reforzad positivamente a los de vuestro alrededor constantemente! Seguro que os lo agradecerán con una sonrisa, ¿hay mayor riqueza en el mundo que una sonrisa no pueda comprar?
📌 Bondad: decidme a mi si el hecho de que el dragón, que seguramente tendría mil millones de cosas que hacer, ayude al pequeño mago no es ser bondadoso. La amabilidad últimamente brilla por su ausencia. La tenemos por doquier pero no le hacemos caso, nos comportamos muy mal con nuestras personas de alrededor y esas mismas son las que a fin de cuentas estarán a nuestro lado para salvarnos de cualquier problema o brindarnos su hombro para consolarnos en él. Seamos el dragón y ayudemos a quiénes lo necesiten, sin buscar o querer lucrarnos de alguna manera.
Por supuesto habrá mayores valores que extraer de estos preciosos cuentos, no me cabe la menor duda. Sin embargo, estos son los que yo he querido destacar y acercaros para reflexionar un poco sobre nuestro comportamiento adulto, que en ocasiones es muy reprobable.
¿Conocíais a la autora?
¿Habéis leído algún libro de Picarona?
¿En qué valor creéis que cojea más el ser humano?
¿En qué valor creéis que cojea más el ser humano?
¡Pero que monada maremeua! y encima educativo y para una educadora infantil esto es primordial, lo tengo muy muy en cuenta.
ResponderEliminarUn besito guapa.
Hoooooola Carol!!!!
ResponderEliminarSabes que me encantan los dragones? Y que esos colores escogidos por lo menos no me ponen de mala leche (hay que ver lo que son capaces de evocarnos unos simples colores, eh?). Si es que los dragones son muy majos. Además porqué no le iba a enseñar a volar, eh? Porqué? En fin, que muy amorosos. Lo de los nombres creo que no es necesario conocerlos siquiera porqué aquñi lo importante es la historia, la trama y los valores. Eduardo Mendoza eso lo hace mucho. Creo que de todos los libros que he leído de él no le ha puesto nombre a ninguno de sus protagonistas.
A lo que voy! Lo bonito de perseguir sueños es que en la teoría está muy bien pero en la práctica te lo imponen como que 'eso no es lo normal' o que 'hay que pagar facturas' y acabas renunciando o por lo menos ya no teniendo ese espíritu luchador con el que habías nacido. Ya se encarga la sociedad de machacarte, ya. Ahora que lo pienso, creo que me voy a leer ese libro yo también a ver si me hace ver las cosas de forma distinta.
Mira, lo de quedarse aislado es un clásico. Yo sin ir más lejos también me pasó algo similar esquiando (soy muy patata en deporte) y acabé rezagada del grupo. Yo no frenaba ni en cuña, hija. De hecho yo no frenaba a no ser que fuese contra un árbol. Ahí sí. Ahí frenaba.
Pues sí y parece que se ha perdido eso de compartir tiempo con los demás. Todo el mundo parece estar muy ocupado en su vida para tener tiempo para los amigos. Un asco. Hay alguien que no se alegre cuándo le sale bien algo a un amigo o familiar, a alguien a quién quieres o aprecias? Porqué si no se hace es que algo falla. O no es buen amigo.
Respecto a la bondad, parece perdida. A veces se es amable y te responden como los gatos: a soplíos. Yo no sé si es que al hacernos adultos crecemos pero el cerebro se nos hace más pequeño o qué, pero vamos, que tu reseña hoy da para una buena reflexión de órdago. La gente va muy con un palo en el culo y también muy triste por la vida y eso no es.
Un besote enooooorme!! ♥
Hola!! me gustan mucho las reseñas que nos traes sobre este tipo de libros, en primer lugar porque la literatura infantil existe y nuestros peques también merecen que se les regalen o compren libros en condiciones. En segundo lugar, porque vuelvo a la infancia al ver lo sencillos e inocentes que son estas historias. Esta, imágenes chulísimas aparte, está cargada de buenos valores que podemos ir trabajando con los niños conforme vamos leyendo el libro con ellos. Gracias por la recomendación. Besos!!
ResponderEliminarLas ilustraciones me han recordado un poco al principito no crees?
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